Dirección y guión: Lars von Trier.
Países: Dinamarca, Suecia y Francia.
Año: 2006.
Duración: 99 min.
Género: Comedia.
Interpretación: Jens Albinus (Kristoffer), Peter Gantzler (Ravn), Fridrik Thor Fridriksson (Finnur), Benedikt Erlingsson (intérprete), Iben Hjejle (Lise), Henrik Prip (Nalle), Louise Mieritz (Mette), Mia Lyhne (Heidi), Jean-Marc Barr (Spencer), Casper Christensen (Gorm), Sofie Gråbøl (Kisser), Anders Hove (Jokumsen).
Esta vez Lars von Traer con su característica forma de rodar, con decorados, luces y personajes casi sin maquillar, nos muestra una situación quizá un poco extraña al principio pero que podría ser real incluso habitual.
Alguien que un día tuvo la idea de formar una empresa pero que no se veía con demasiados ánimos ni argumentos para dar la cara en situaciones comprometidas se inventa un presidente ficticio, naturalmente él es la mano derecha del Jefe y ante cualquier reclamación de los empleados siempre tiene la misma respuesta ''Son Ordenes del Jefe'' ''Lo ha dicho el Jefe''.
Pero… un buen día decide vender la empresa, y ahí empiezan sus problemas de verdad pues los compradores quieren ver al jefe, para solucionar ese problema contrata a un actor que se hará pasar por el Jefe, cuando el actor va a la empresa y empieza a familiarizarse con los empleados se da cuenta que no es mas que un hombre de paja, poco a poco se van descubriendo las jugarretas que les ha hecho a los empleados a lo largo del tiempo.
El problema real y final al que se tendrá que enfrentar el dueño será al cambio de actitud del actor al que ha contratado como supuesto Jefe.
Interesante propuesta la de esta cinta
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